Treinta horas de angustia entre los escombros: República Dominicana llora a sus 184 muertos tras el colapso en JetSet
Por Moisés Lizardo | VEMO DIGITAL
“El silencio ahora no es señal de calma, sino de miedo” —dijo uno de los rescatistas en Santo Domingo.
SANTO DOMINGO – Han pasado más de 30 horas desde que el techo de la icónica discoteca JetSet se desplomó en pleno merengazo de lunes por la noche. El país entero despierta entre luto, rabia e incertidumbre. Al menos 184 personas han muerto, más de 150 han sido trasladadas a hospitales, y decenas siguen desaparecidas. El eco de las súplicas bajo los escombros se ha ido apagando, y con él, la esperanza de muchos familiares que aún esperan noticias de sus seres queridos.
La tragedia ha conmocionado no solo a República Dominicana, sino a toda la región. JetSet, con más de cinco décadas de historia, era mucho más que un local de entretenimiento: era un símbolo cultural, un punto de encuentro de figuras políticas, artísticas y empresariales del país. La noche del desastre, la discoteca estaba repleta. Se calcula un aforo cercano a las 2.000 personas.
Una madrugada rota por el estruendo
Fue alrededor de las 11:42 p.m. del lunes cuando el estruendo cortó la música y apagó las luces. La estructura del techo colapsó por completo. Quienes estaban cerca de la salida lograron escapar; otros no corrieron con la misma suerte.
Desde entonces, los equipos de rescate no han descansado. “No se descarta nunca nada. Nosotros vamos a ir peldaño a peldaño”, afirmó Juan Manuel Méndez, director del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), al anunciar nuevas cifras en la mañana del miércoles. El operativo incluye personal local, brigadas de Puerto Rico y unidades del ejército israelí, sumados en una lucha contra el tiempo.
El silencio como herramienta de búsqueda
En el lugar del siniestro, familiares, rescatistas y comunicadores se han turnado entre el polvo y la ansiedad. El silencio se ha convertido en una herramienta vital. “Necesitamos oír si alguien pide ayuda”, explicaban los socorristas, algunos de ellos llorando mientras insistían a los presentes en guardar calma.
Las esperanzas menguan, pero no se extinguen. La sociedad dominicana se aferra a cada rescate como a un milagro. Entre los sobrevivientes encontrados con vida hay una mujer colombiana de 33 años, oriunda de Medellín, quien ya fue dada de alta. Su compañero, también colombiano, permanece hospitalizado. Otros cuatro ciudadanos del mismo país aún están desaparecidos.
El peso de las pérdidas
El país aún intenta asimilar la dimensión de la tragedia. Entre los fallecidos figuran nombres que resuenan en todo el territorio: Rubby Pérez, ícono del merengue; Eduardo y Alexandra Grullón, ejecutivos del Banco Popular; el expelotero Octavio Dotel; la cardióloga Lourdes Ricart; el director de Infraestructura Urbana del Distrito Nacional, Christian Tejeda; y el presidente del Club de Leones de Haina, Luis Emilio Guillén.
Eduardo Estrella, ministro de Obras Públicas y padre de uno de los fallecidos, acudió al lugar junto al presidente Luis Abinader. A esa hora aún se buscaba a su esposa entre los escombros. “Estamos con cada familia, compartimos su dolor”, dijo el mandatario.
Un pasado que ya advertía
No es la primera vez que JetSet enfrenta problemas estructurales. En 2023, un incendio provocado por un rayo puso en evidencia debilidades del sistema eléctrico. Entonces no hubo víctimas. Ahora, con decenas de cadáveres aún por identificar —muchos de ellos posiblemente empleados del lugar—, las preguntas se multiplican. La encargada de prensa del local se negó a revelar cuántos trabajadores estaban presentes esa noche.
Antonio Espaillat, dueño de la discoteca y una de las figuras más influyentes del mundo empresarial dominicano, difundió un video en redes expresando su pesar. “Estamos colaborando total y transparentemente con las autoridades”, aseguró. Pero para muchos, eso no basta.
“Esto no fue un accidente”
Figuras del arte y la música han alzado su voz. Juan Luis Guerra compartió un versículo bíblico acompañado de un mensaje de solidaridad. Marc Anthony, Ricardo Montaner, Olga Tañón y Fernando Villalona también se pronunciaron. La cantante Natti Natasha canceló un evento previsto para el miércoles. “No es momento de celebración, es momento de duelo”, afirmó.
Pero fue Tokischa quien más sacudió las redes: “Esto no fue un accidente. Fue el resultado de una cadena de negligencias. Se está vendiendo la seguridad del ciudadano por sobornos o conexiones”.
Solidaridad y dolor colectivo
Mientras tanto, el país responde con generosidad. El Hemocentro Nacional informó que se han recolectado 419 unidades de sangre. El Servicio Nacional de Salud indicó que 45 pacientes siguen hospitalizados, con edades entre 21 y 67 años. “Se están dando todos los cuidados posibles”, aseguraron.
Pero más allá de las cifras, persiste el duelo. La tragedia en JetSet no solo ha cobrado vidas, también ha herido la confianza de una nación. Una tragedia que ha dejado claro que el espectáculo no puede seguir cuando la seguridad no está garantizada.
Y ahora, el silencio ya no ayuda a encontrar. Solo duele.