«Bravos de Margarita acaricia la gloria y Cardenales enfrenta la presión histórica»
Los Bravos de Margarita se encuentran a las puertas de hacer historia en la LVBP. Tras agrietar el Estadio Antonio Herrera Gutiérrez, hogar de los Cardenales de Lara, con dos contundentes triunfos en la serie final, el equipo isleño hará su debut como finalista en la isla este miércoles, con una ventaja de 2-0 y la posibilidad de seguir marcando hitos en la temporada 2024-2025.
Dominio en territorio rival
Los Bravos se han consolidado como un visitante implacable, ganando nueve de sus últimos diez juegos en la postemporada, incluidos cuatro en Barquisimeto. Este desempeño les permite soñar con su primera corona, apoyados por un pitcheo dominante, una ofensiva explosiva y una defensa impecable. En contraste, los Cardenales luchan contra una estadística demoledora: de las siete ocasiones en que un equipo visitante ganó los primeros dos juegos de una final, seis lograron el campeonato.
“Hemos sido consistentes en los tres aspectos fundamentales del juego: ofensiva, pitcheo y defensa. No se necesita hacer nada espectacular para ganar, solo jugar buen béisbol”, comentó José Moreno, mánager de Bravos, tras el segundo triunfo.
Errores estratégicos y vuelo bajo de Lara
El pitcheo de Margarita ha sido clave, mostrando una efectividad colectiva de 2.50 en los dos primeros juegos. Su bullpen se destacó con 8.0 entradas sin permitir carreras, mientras que la ofensiva insular sumó 10 extrabases, una mejora significativa respecto a la etapa anterior.
Por otro lado, Henry Blanco, piloto de los Cardenales, apostó por una defensa arriesgada que hasta ahora no ha dado frutos. Cambios en las posiciones de Ildemaro Vargas, Harold Castro y Rangel Ravelo han resultado en jugadas cuestionables que, aunque no marcaron errores, sí influyeron en el marcador.
El contraste defensivo lo puso Margarita, que completó cinco doble plays, incluido uno de Alexi Amarista que dejó a la afición boquiabierta en el primer juego.
Juego 3: Castillo vs. Rondón
El miércoles, Ángel Rondón (Bravos) y Máximo Castillo (Cardenales) serán los encargados de subir al montículo. Rondón llega invicto (6-0) en la temporada, mientras que Castillo, aunque tuvo un desempeño irregular en el Round Robin, cuenta con buenos antecedentes frente a Margarita, con un EFE de 0.75 en dos aperturas.
Cardenales enfrenta un panorama complicado: revertir un 2-0 en contra para evitar un 3-0 que sería casi definitivo. Mientras tanto, Bravos quiere asegurar la celebración en su casa, la Perla del Caribe, dejando claro que su fórmula de éxito está más viva que nunca.
El dato
Cardenales acumula 10 derrotas en sus últimos 11 juegos decisivos y esta es la séptima ocasión en sus 20 finales que pierde los dos primeros encuentros, según datos de Raúl De La Cruz Veliz.